Los costes de los envíos internacionales están en máximos históricos, especialmente en 2021. A lo largo de la ruta marítima entre China y la UE, transportar un contenedor de acero de 40 pies de carga por mar desde Shanghái a Róterdam cuesta ahora un récord de 10.522 dólares, un enorme 547% más que el promedio estacional de los últimos cinco años. Entre Asia y América del Norte, las tarifas contractuales rondan los 2.500 a 3.000 dólares por un contenedor de 40 pies, entre un 25% y un 50% más que hace un año. Y entre China y el Reino Unido, el coste del transporte marítimo ha aumentado más del 350% en el último año.
¿Por qué el transporte marítimo es tan caro en 2021? ¿Qué provoca el aumento de los costes del transporte marítimo?
La principal razón del aumento continuo del precio del transporte marítimo es la COVID-19. En los dos últimos años, la pandemia ha alterado los patrones normales de oferta y demanda, lo que ha provocado retrasos en los puertos y las redes de distribución interior, lo que ha sometido a una intensa presión al sector del transporte marítimo. El auge de la demanda de bienes de consumo inducido por la pandemia, la escasez mundial de contenedores marítimos y el accidente del Canal de Suez también han tenido efectos significativos en el aumento del precio del transporte marítimo.
¿Cómo deben hacer frente las empresas manufactureras al aumento de los costos de envío?
En vista de que la interrupción actual del transporte marítimo de alta mar muestra pocas señales de disminuir y se estima que los precios se mantendrán en estos niveles hasta 2023, tanto las empresas de comercio electrónico como otras pequeñas empresas deberían considerar la diversificación de sus opciones de cumplimiento para reducir los costos de envío en el corto plazo. Muchas empresas están considerando el transporte aéreo como una opción alternativa y más confiable para las operaciones logísticas internacionales a fin de proteger la integridad de las cadenas de suministro globales.
Mientras tanto, las empresas manufactureras también podrían ajustar la forma de ensamblaje de los productos que ocupan un gran volumen. Tomemos como ejemplo los imanes de elevación de placas de acero anteriores; se recomienda y es más favorable para los clientes que fabriquen la viga ellos mismos y encarguen los módulos magnéticos y otros accesorios de control, para reducir el costo total del equipo, lo que resultará en un ahorro bastante grande.
Sin duda, el aumento de los costos de envío afecta a las exportaciones y llevará tiempo recuperarse, probablemente varios años. No lo sabemos con certeza. ¡Solo recemos para que las cosas mejoren en un futuro cercano!
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